Manuel M. Ponce (1882-1948) ocupa un lugar privilegiado en la vida musical de México gracias a su vasta e importante producción, a pesar que casi la mitad de su música se ha perdido. Abarcando la mayoría de los géneros, así como prácticamente todas las formas, la obra conocida de M. M. Ponce incluye una infinidad de canciones (como la mundialmente famosa “Estrellita”), dos Óperas, música para varios instrumentos, música de cámara y música para orquesta. Sin embargo, sus obras conocidas para piano y guitarra son las más numerosas.

La obra de Ponce ofrece una atractiva diversidad de estilos, prevaleciendo –a grandes rasgos– un romanticismo que viene a cerrar el capítulo de los músicos que le precedieron, y un modernismo que se manifiesta esporádicamente desde las obras de juventud, pero se consolida a partir de su estancia parisina en 1925. Si los comparamos, advertimos notorios contrastes armónicos, tímbricos y formales.

Podemos además distinguir aquellas composiciones que forman parte del romanticismo universal (enriquecido por sus estudios en Italia y en Alemania, de 1905 a 1907, con los herederos de la escuela lisztiana), de otras que constituyen un romanticismo nacionalista: inspirado en la música popular mexicana, M. M. Ponce creó motivos propios de auténtico sabor regional armonizando e introduciendo melodías populares en pequeñas y grandes formas -iniciando así el movimiento de la música nacionalista en México hacia 1912.

En 1925 Ponce viaja a París, en donde permanecerá hasta 1933. Allí, define en sus nuevas composiciones un estilo propio de carácter modernista y comienza a introducir el nacionalismo indígena, creando un ambiente de música autóctona del México prehispánico.

A partir de 1933 M. M. Ponce regresa definitivamente a México y crea sus obras de madurez. Algunas composiciones de este período ofrecen una admirable expresión de hispanismos, sea con un espíritu marcadamente andaluz, sea dentro de una atmósfera que evoca épocas antiguas.

M. M. Ponce fue el primer compositor mexicano con proyección internacional. Ampliamente conocido en el extranjero, Manuel M. Ponce recibió a lo largo de su trayectoria numerosos reconocimientos y fue miembro honorario de diversas asociaciones musicales del mundo. En 1947, el gobierno de México lo galardonó con el Premio Nacional de Ciencias y Artes, una de las más altas distinciones del país.